Seguro que todos vosotros habéis jugado alguna vez al burro con las cartas. ¿Pero alguna vez os habéis convertido realmente en burro mientras jugáis? ¡Con No seas Burro si pierdes tendrás que transformarte!
No seas burro
No seas burro es un divertido y original juego de mesa de Cife en el que el objetivo del juego es conseguir completar la familia de burros.
Pero cuidado, porque si fallas… ¡Tú mismo puedes acabar convirtiéndote en burro!
¿Cómo se juega?
El juego incluye una baraja de 16 cartas con 4 diferentes familias de burros, 3 zanahorias, un hocico de burro, 8 orejas de burro y 4 diademas para colocar las orejas en ellas.
Antes de empezar, cada jugador se pone una diadema en la cabeza con las orejas de burro echadas hacia atrás y se colocan en el centro de la mesa tantas zanahorias como jugadores haya menos una. Es decir, siempre habrá una zanahoria menos que el número total de jugadores.
Se puede jugar entre 2, 3 ó 4 jugadores. Si el juego es entre 2, se reparten 8 cartas. En el resto de casos, se reparten 4. El repartidor será siempre el jugador más joven. Nadie puede ver las cartas de otro jugador ni enseñar sus cartas.
El objetivo del juego es conseguir una familia completa de burros.
Para ello los jugadores pasarán todos a la vez, una a una en cada ronda, las cartas que no les valgan al jugador de su derecha, empezando por el repartidor y poniéndolas boca abajo sobre la mesa sin que nadie más las vea.
Cada turno será marcado por el repartidor, que tendrá que gritar “¡PASO!” para indicar a los jugadores que pueden pasar sus cartas a los contrincantes.
Si en algún momento de la partida un jugador consigue reunir 4 cartas iguales, gritará “¡BURRO!” y todos los jugadores tendrán que darse prisa en coger las zanahorias de la mesa, incluido el que da la voz de alarma.
¡Quien se quede con las manos vacías comenzará a transformarse en burro levantando una de las orejas de su diadema!
El juego termina cuando uno de los jugadores se ha transformado completamente en burro llevando puestos todos los accesorios: la diadema con las 2 orejas y, finalmente, el hocico.
¡Así que para ser el mejor jugador de la partida hay que conseguir no verse obligado a usar ninguno de los complementos que trae el juego para convertirse en un burro!
Es un juego de cartas muy divertido porque a medida que avanza el juego vas viendo cómo los jugadores se convierten en burros mientras van sumando zanahorias, las orejas o el hocico de burro. ¡Las risas y la diversión están aseguradas!
Nos gusta porque…
En general, nos gustan mucho los juegos de mesa porque nos permiten pasar buenos momentos de ocio familiar y afianzar vínculos con los peques.
Además de ser muy divertido, No seas Burro es también un juego de estrategia y rapidez. Los peques tienen que planificar sus descartes para ir formando las familias de cartas adecuadas y ser más rápidos que los demás para no convertirse en burro.
También nos gusta su gama de edades. Pueden jugar los niños a partir de 6 años y es divertido incluso para los adultos. Además, es un juego muy dinámico en el que las partidas duran unos 15 minutos, así que son perfectas para mantener vivo el interés de los más peques de la casa.
Sus reglas de juego son sencillas y breves, muy fáciles de aprender y recordar. Nos parece un juego de mesa perfecto para jugar en grupo, con la familia o los amiguitos.
Y además ¡los juegos de mesa tienen multitud de beneficios para los niños!
Beneficios de los juegos de mesa para los niños
Los juegos de mesa son uno de los juguetes favoritos de los niños de todas las edades. Además, con los juegos de mesa los peques pueden adquirir y desarrollar múltiples habilidades:
- Practican matemáticas, al contar los puntos que van sumando a medida que avanza la partida.
- Aprender a resolver problemas ya que durante el juego deben superar pruebas y obstáculos, lo que les prepara para solventar los problemas que aparecen en su vida diaria.
- Mejoran la memoria, el pensamiento lógico, estratégico y la agilidad mental. Todo lo cual está directamente relacionado con el coeficiente intelectual.
- Aprenden a valorar el esfuerzo, para conseguir sus objetivos.
- Les educan en normas, ya que deben respetan las reglas del juego.
- Aprenden a perder y a ganar y, lo que es aún más importante: aprenden de sus errores.
- Mejoran las habilidades sociales, ya que la gran mayoría de ellos están diseñados para jugar en grupos o en parejas, lo que permite hacer nuevos amigos o disfrutar de un rato muy divertido junto a nuestros seres más queridos.
- Jugando en familia, fortalecen los vínculos entre padres e hijos y entre hermanos.
- Muchos juegos de mesa también fomentan la cooperación y el trabajo en equipo al animar a los jugadores a colaborar entre ellos para derrotar al rival y ganar la partida.
Y, al margen de estos beneficios, pueden trasladarse de un lugar a otro con gran facilidad. Una gran ventaja ya que pueden llevarse a cualquier parte con total comodidad, ya que cuentan con tableros plegables y accesorios fáciles de transportar que permiten disfrutar del juego sea donde sea.
Glop Games, una original marca de juguetes de Cife
Glop Games es una marca de Cife con un variado repertorio de juguetes y juegos para niños. Nosotros ya hemos tenido (y tenemos) en casa otros juguetes de esta firma y siempre son divertidos y originales. Glop Racing Car, Laser X, Wubble Bubble, Hamster in a House, Tummy Stuffers o Flipazoo son algunos de sus juguetes más famosos.



Todos ellos son juegos y juguetes de última tendencia, siempre con un toque diferente: peluches 2 en 1 reversibles, peluches que son a la vez bolsa de almacenamiento de juguetes, burbujas gigantes que no se rompen y botan como una pelota, mascotas robóticas, etc. Y, por nuestra experiencia con ellos, están muy bien diseñados y desarrollados de manera que los peques mantienen vivo el interés por ellos durante mucho, mucho tiempo.
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